Hola, que tal?
Como estás amor de mi vida?
Uf. Que maravillosa sonrisa
Tú siempre me asombrarás
Cada vez que te apareces
Todo alrededor se resplandece
al verte, yo... veo la felicidad.
¿y qué me cuentas de nuevo?
¿cómo te va en el trabajo?
Woao, te llegó otro ascenso.
Sin duda, te lo has ganado.
Hass estado allí tantos años
y tantos sitios has visitado.
Nueva York, Miami, Colorado,
París Tokio, Stalingrado.
Yo siempre te he esperado
como llegan a esperar los ancianos
viviendo de sus buenos recuerdos
fantaseando con falsos momentos
que nunca ocurrieron.
Mientras tú recorres el mundo,
yo acá te espero.
Mientras conoces otros besos,
yo acá te espero.
Mientras te exploran otros cuerpos,
yo acá te espero.
Bah! Sé que no volverás.
Después de tantos años.
¿Qué es lo que puedo esperar?
Solo me siento y te recuerdo
Evoco tu cuerpo y llegas como un espectro.
Te sientas en el sillón de cuero
Y te digo lo que siento
te relato cualquier cuento
me río con cada recuerdo
me reviento el cerebro
pensando cualquier fantasía
aunque sea una tontería
para verte sonreír
para sentirme feliz.
Y tu me escuchas
yo creo que lo haces
allí, tan callada y plácida
como cada domingo en la mañana.
A veces escucho las palabras
pero me llegan como dagas
que me desgarran el alma
como ese domingo en la mañana
cuando me dijiste que te marchabas.
Creo que allí se detuvo el tiempo
y desde ese día yo te espero
y mientras tanto te veo
te expreso mis sentimientos
te digo que te deseo
si tan solo supieras
lo mucho que aún te quiero
Ya lo sabes, te lo he dicho.
Nah! Eres solo ese espectro,
producto de mis pensamientos
¿Dónde estarás en este momento?
¿Qué estarás haciendo?
Yo... yo acá te espero.
Como estás amor de mi vida?
Uf. Que maravillosa sonrisa
Tú siempre me asombrarás
Cada vez que te apareces
Todo alrededor se resplandece
al verte, yo... veo la felicidad.
¿y qué me cuentas de nuevo?
¿cómo te va en el trabajo?
Woao, te llegó otro ascenso.
Sin duda, te lo has ganado.
Hass estado allí tantos años
y tantos sitios has visitado.
Nueva York, Miami, Colorado,
París Tokio, Stalingrado.
Yo siempre te he esperado
como llegan a esperar los ancianos
viviendo de sus buenos recuerdos
fantaseando con falsos momentos
que nunca ocurrieron.
Mientras tú recorres el mundo,
yo acá te espero.
Mientras conoces otros besos,
yo acá te espero.
Mientras te exploran otros cuerpos,
yo acá te espero.
Bah! Sé que no volverás.
Después de tantos años.
¿Qué es lo que puedo esperar?
Solo me siento y te recuerdo
Evoco tu cuerpo y llegas como un espectro.
Te sientas en el sillón de cuero
Y te digo lo que siento
te relato cualquier cuento
me río con cada recuerdo
me reviento el cerebro
pensando cualquier fantasía
aunque sea una tontería
para verte sonreír
para sentirme feliz.
Y tu me escuchas
yo creo que lo haces
allí, tan callada y plácida
como cada domingo en la mañana.
A veces escucho las palabras
pero me llegan como dagas
que me desgarran el alma
como ese domingo en la mañana
cuando me dijiste que te marchabas.
Creo que allí se detuvo el tiempo
y desde ese día yo te espero
y mientras tanto te veo
te expreso mis sentimientos
te digo que te deseo
si tan solo supieras
lo mucho que aún te quiero
Ya lo sabes, te lo he dicho.
Nah! Eres solo ese espectro,
producto de mis pensamientos
¿Dónde estarás en este momento?
¿Qué estarás haciendo?
Yo... yo acá te espero.
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